Siempre he dejado migajas en el mantel, las tuyas las dejé por los suelos... estoy a punto de tirarlas; así las hormigas llegarían a hacer el resto de lo que yo no puedo.
Limpiar los restos, por que quiero comerlos pero no muero de hambre; y cuando la tenga no me serán suficientes migajas del cariño que me dejaste.
Me he fumado un cigarro de tus besos,se van agotando en cada toque... bien sabemos que al final; ya no queda otro por fumarme.No hay más que dejarlo todo en el cenicero y terminar el vicio.
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